miércoles, 29 de enero de 2014

LA VIDA PARA CON DIOS

LS VIDA PARA CON DIOS
LA VIDA PARA CON DIOS
LA VIDA PARA CON DIOS COMO AFIRMA  EL SANTO CHILENO


El nobel Santo Chileno San Alberto Hurtado dijo: “La Vida se nos da para buscar a Dios. La muerte para encontrarlo y la eternidad para poseerlo” Reflexionemos sobre estas exhortaciones: Si nos hacemos Hijos de Dios mediante el Sacramento del Bautismo tenemos por tanto el compromiso de buscar a Dios a fin de obtener las promesas de la Salvación del alma. La Salvación conlleva para el cristiano el deber de amarle y amar al prójimo como lo establece Cristo, su Doctrina y su Iglesia. En nuestro peregrinar por la tierra en la corta o larga vida que se nos regala, si la búsqueda de Dios ha sido afortunada, nos permitirá mantenernos a su lado, por la recta y real vía que nos conduce al cielo al final de la existencia. La Seguridad y la perseverancia de tal búsqueda tiene que enriquecerse con la fe, la esperanza y el amor, el cumplimiento de nuestros deberes religiosos, la frecuencia de los sacramentos en especial la Penitencia y la Eucaristía, que conformarán en el ser humano una coraza  contra el primer enemigo: el Pecado, que es la ofensa grave o leve, por acciones, obras, pensamiento y omisiones. Como humanos somos pecadores y sabemos que la vida de gracia es difícil y no tenemos dudas que cada vez con mayor frecuencia nos presiona y nos hace presa de la concupiscencia; pidamos perdón y ayuda al Dios que buscamos y estaremos seguros que su Espíritu de amor, nos recibirá en su regazo por su divina misericordia, e impartirá en nosotros la gracia suficiente, la fortaleza necesaria y confianza para recuperarnos y continuar nuestro itinerario.
Cuando después de haber vivido en  el Reino de Dios en la tierra y tengamos que rendir cuentas ante el llamado de Dios, nos iremos al Padre con gusto, arrepentidos y satisfechos de nuestra labor de apostolado, entonces con la muerte encontramos a Cristo para seguir adorándole, alabándolo y sirviéndole por el tiempo que el misma Dios disponga, directamente desde el Cielo o desde su antesala en el Purgatorio donde se limpiarán nuestra penas temporales, y al final la eternidad del Cielo, para ver cara a cara a la Santísima Trinidad, Dios Trino, para vivir con gozo y alegría permanente esta fase maravillosa de la Salvación del alma.
Sobre esta Salvación, la cual es más factible en la religión católica que en cualquier otro credo cristiano conocido, y quienes sin conocer a Cristo, hacen las cosas con amor, son dignos también de poseer a Dios en la eternidad.
El Santo Padre Francisco, Obispo de Roma y Vicario de Cristo en la tierra, mantiene desde su elección el pasado 13 de marzo del año pasado una catequesis profunda y extensa en su diversas ocasiones que tiene en sus Misas Diarias,  en las concentraciones en la Plaza San Pedro de los miércoles, y solemnidades litúrgicas, en el rezo del Ángelus de todos los días, en sus visitas pastorales dentro y fuera de Italia, en sus exhortaciones y en sus Encíclicas y en el contacto permanente con el pueblo de Dios, y recomienda a los cristianos que estemos alegres, que hagamos evangelización en forma permanente y en todos los ambientes donde vivamos y trabajemos, que es necesario darle a Cristo y a su Iglesia los máximos esfuerzos, y que el clero cristiano se vuelque a las calles y a las periferias para llevar al redil a la multitud de ovejas descarriadas.. Acojamos sus consejos y recomendaciones, y llevando a Cristo en nuestros corazones, invitémosle  a salir con nosotros para lograr en corto plazo la evangelización total del pueblo de Dios.

                                                                                                   ENERO 2014    

No hay comentarios: