HISTORIA Y RAZÓN DEL CORPUS CHRISTI
A fines del siglo XIII en Bélgica, en la Abadía de Cornillón, se inició un Movimiento Eucarístico que estableció la Exposición y Bendición con el Santísimo Sacramento del Altar, el uso de la campanillas durante la Elevación de la Hostia y la Fiesta del Cuerpo de Cristo (Corpus Christi). En esa iniciativa influyó Santa Juliana priora de la abadía. El Obispo Roberto de Thorete de Bélgica oficializó la fiesta en su Diócesis en 1247. El Papa Urbano IV inspirado en el milagro eucarístico de Bolsena: “Donde un sacerdote que celebraba la Santa Misa en 1264, tuvo dudas de que la consagración fuera un hecho real, y al momento de partir la Sagrada Forma, vio salir de ella sangre que empapó el corporal”; esta reliquia se llevó en procesión hasta Orvieto y hoy se conservan los corporales manchados de sangre, procedió mediante la bula “Transiturus” del 8 del septiembre del mismo año a extender la Fiesta del Corpus Christi en toda la Iglesia Universal. Después de su muerte, los Papas Clemente V y Juan XXII la ratificaron; para el siglo XIV los Papas Martin V y Eugenio IV recomendaron su celebración con procesión. Finalmente el Concilio de Trento declaró esta tradición como muy piadosa y religiosamente fue introducida en la Iglesia de Dios, decidiendo que todos los años se celebre este excelso y venerable sacramento con singular veneración y solemnidad, y reverente y honoríficamente sea llevado en procesión por las calles y lugares públicos. Para que los cristianos den testimonio de su gratitud y recuerdo por tan inefable y verdaderamente divino beneficio, por el cual se hace nuevamente presente la victoria y el triunfo de Cristo sobre la muerte y el pecado mediante su resurrección
En la historia del Cristianismo, han sido mucho los milagros eucarísticos registrados, que han demostrado y aún hoy demuestran la realidad de la presencia del Cuerpo y la Sangre de Jesucristo en las especies del pan y el vino consagradas por sus ministros. Hoy día el relativismo cuestiona tan inefable misterio; quienes creemos respondemos con contundencia a los cuestionamientos: Cuando se nos interrogue ¿como puede Cristo morir mas de una vez?, recordemos la palabra de Dios en Malaquías 1,11: “Pues desde el sol levante hasta el poniente, grande es mi nombre entre las naciones, y en todo lugar se ofrece a mi Nombre un sacrificio de incienso y una oblación pura. Así dice Yahveh”; los sacerdotes católicos de hoy dan sentido pleno a esta profecía al celebrar y simbolizar cada día el único Sacrificio hecho por el Salvador hace mas de 2000 años para salvar toda la humanidad.
Un pasaje de la SUMA Teológica de Santo Tomás de Aquino dice: “Que el verdadero Cuerpo y Sangre de Cristo presente en la Eucaristía, es algo que no se puede percibir ni con los sentidos ni con el intelecto, sino que solo se percibe con la fe, la cual se apoya en la autoridad de Dios; en ese sentido San Cirilo comentando el pasaje de Lucas 22,19; “ Este es mi cuerpo que es entregado por vosotros…..”, nos dice: No pongas en duda si esto es verdad, sino más bien acepta con la fe la palabra del Salvador, porque siendo él la verdad no miente. Cristo es el pan que ha bajado del cielo, quien como de este pan no morirá nunca sino que vivirá para siempre.
JUNIO 2010.
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