domingo, 27 de mayo de 2012

EL SEXTO NANDAMIENTO DE LA LEY


“Léalo y Reflexione”                                                                   Francisco Jiménez Fermín
EL SEXTO MANDAMIENTO -- QUE POCOS CUMPLEN --

Un Mandamiento nuevo nos da el Señor: Que nos amemos todos como Dios nos amó, así cantamos en la Misa. Quien ama a Dios nada puede temer ni hay mal que pueda hacer. Pero además en las Tablas de la ley entregadas por Dios Moisés,  de los 10 mandamientos, al SEXTO, que pocos creyentes dan importancia por el egoísmo personal, por ignorancia, por el relativismo, o simplemente porque se abusa de la misericordia de Dios. Quien ama a Dios cumple todos sus mandamientos sin dejar ninguno por fuera, luego si dejas de cumplir el Sexto: que se refiere a la PUREZA del alma y del cuerpo, cometes desobediencia grave o pecado mortal, te pones de espalda a Dios y tu alma queda expuesta a la condenación eterna..
La Biblia tanto en Éxodo 20,14 como Deuteronomio 5,17 nos advierten: “No cometerás adulterio”, y Jesus  nos recuerda, en Mt 5,27-28: “Has oído que se dijo: “No cometerás adulterio”. Pues yo os digo: Todo el que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón. La tradición de la Iglesia católica ha entendido el Sexto Mandamiento como referido  a la globalidad de la sexualidad humana, por lo que todo relación sexual realizada fuera del Matrimonio Sacramental, constituye un Pecado Grave, siendo por su puesto faltas graves la fornicación prematrimonial, las que se realizan en las uniones concubinarias de hecho, las que se realizan entre parejas del mismo sexo, las que se realizan usando los anticonceptivos o mecanismos que impidan la procreación, que como la comunión en la parejas, son principios vitales del matrimonio; finalmente se peca contra la pureza con la lujuria, masturbación, pornografía, la prostitución, la violación,
Esa desobediencia ha sido y es frecuente en los seres humanos, y el detonante de los misma esta en el placer sexual, que en la relación  intima entre hombre y mujer ha puesto el mismo Dios, pero que desordenadamente lo han utilizados las parejas. Hoy con los problemas sociales, el hambre, la superpoblación en muchos lugares y la pobreza en otros, junto con la tecnología moderna y la publicidad que erotizan la mente del ser humano, permite que no se cumpla con el Sexto Mandamiento de la pureza y lo peor que al pensar que todo la gente lo hace, se relativisa el hecho, se hace costumbre, y con frecuencia en los cristianos es un pecado de omisión, del que muy pocos no tienen conciencia de culpa y que por tanto no tienen el deber de cumplir con las exigencias de Dios y de su iglesia.
Cuanta es la población de cristianos católicos, y cristianos de otros credos que asisten y cumplen con el precepto dominical y que no se acercan a la Eucaristía por estar en estado de pecado, o que se acercan a comulgar y por supuesto lo hacen sacrílegamente, pues el cuerpo y sangre de Cristo solo le servirá para su condenación. Cuantos son las personas que no asisten a Misa los domingos y que están en esta situación y además en otras faltas graves por incumplimiento del Decálogo, posiblemente sean la mayoría de los creyentes y todos los no creyentes, a quienes estamos en la obligación de evangelizar, y es la jerarquía de la Iglesia, y sus distintos movimientos de apostolados los primeros que han de enrolarse en esta misión de hacer  obras de misericordia de enseñar a quien no sabe, de ayudar a sacar hacia la luz  quienes están en el error, y de ser ejemplo y dar testimonio en forma permanente del día a día, tanto en el cumplimiento del sexto  mandamiento como con los demás. En el año de la fe que la iglesia universal realizará de octubre del 2012 a octubre del 2013, sería una oportunidad maravillosa para que las autoridades y todos los cristianos católicos nos inscribamos en esa misión de la Conversión Permanente de nuestros hermanos.                                                                                MAYO 2012.                                                        

LA PALABRA DE DIOS ES ETERNA


“Léalo y Reflexione”                                                                   Francisco Jiménez Fermín
LA PALABRA DE DIOS ES ETERNA, SIEMPRE VIGENTE

A quienes leen esta columna les ruego hacer una reflexión profunda y si les queda dudas por favor entre en contacto por el telf.. 04166958400 o escribe al correo franjinfer@cantv.net.  Te ofreceremos nuestra humilde orientación.
Cristo es amor, es camino verdad y vida, si crees en Él,  tienes que ser coherente con tu fe y amarle, pero no en apariencia y solo en las buenas, sino de corazón, con sinceridad y los momentos difíciles, porque el mismo Cristo lo exige: “si me amas cumple mis mandatos o mis mandamientos” que son su Palabra. Recuerda siempre, que desde que se hizo hombre, desde su nacimiento, pasión, muerte, resurrección, fundación de su iglesia y ascensión al cielo, las poblaciones en el mundo han visto pasar todo: guerras, reyes, autócratas, dictadores, traidores, bondades y maldades, pero lo que ha quedado y quedará incólume sin variar es la esencia de la PALABRA de DIOS, recogida en la Santa Biblia e interpretada por su única Iglesia,  cuyo primer pontífice fue Simón Pedro , desde entonces la religión es, ha sido y será: una y única, santa, apostólica y católica de todo el universo.
Reflexionemos sobre esta Palabra, en los versículos  15, 16 y 17 del Capítulo 14 del Evangelio según San Juan, Cristo dijo a sus Apóstoles: “Si Ustedes me aman guardarán mis mandamientos y yo rogaré al Padre y les dará otro Protector que permanecerá siempre con Ustedes: El Espíritu de la verdad, a quien el mundo no puede recibir, porque no lo ve ni lo conoce, pero Ustedes lo conocen, porque está con Ustedes  y permanecerá en Ustedes. En el Capítulo 17 versículos 20 y 21: dirigiéndose al Padre Dios: Cristo ora así:“No ruego sólo por éstos, sino también por todos aquellos que creerán en mi por su palabra. Que todos sean uno, como tú, Padre, estás en mí y yo en Tí. Que ellos también sean uno en nosotros, para que el mundo crea que Tú me has enviado.
Afirma que dará todo su amor por sus amigos, si son cumplidores de su Palabra recogida en la Biblia y que podemos leer tranquilamente; no basta con decir creo en Cristo, es imperativo aceptar sus enseñanzas y lo establecido por su Iglesia, que es una, así lo dijo a Pedro, sobre ti fundo mi Iglesia, no varias iglesias sino una sola; si hoy has varias denominaciones del credo cristiano, culpable han sido los hombres que no cumplieron con su mandato y no fueron sinceros en su amor. Cristo les prometió a sus Apóstoles el Protector que el Padre les dio después de Ascender al Cielo; ese Dios Santificador que celebramos en la fiesta de Pentecostés, conforman lo que su iglesia define como el misterio de la Santísima Trinidad, un solo Dios y tres personas distintas Padre, Hijo y Espíritu Santo. Y Esa iglesia guiada y protegida por el Espíritu de Dios implementa el mandato que le fue ordenado, cuando el mismo Cristo creó el Sacramento del Orden Sacerdotal, y aparecieron nuevos Apóstoles, después de pentecostés, los auxiliares de estos: los Presbíteros y los Diáconos. Esta jerarquía eclesiástica de nuestra religión católica es precisamente junto con todos los bautizados influidos por el Espíritu Santo, quienes predican y evangelizan siempre para que se cumpla lo que Cristo dijo en el Evangelio de Juan 17, 20-21. Nosotros hoy día somos todos aquellos que por la prédica y la catequesis de muchos cristianos bautizados creemos afortunadamente en Jesucristo, y creemos para amarle de verdad, con el corazón, con coraje en las buenas y en las malas, sin presunciones, cumpliendo los mandatos, sin ofender al Señor, arrepentidos si le hemos ofendido, y haciendo obras de caridad corporales y espirituales. Hermano el cumplimiento de los mandatos no debe quedarse en el esfuerzo mínimo, sino tratar siempre de dar los máximos esfuerzos                                                                                           MAYO 2012